The 1852

Comentarios destacados

• Tonyo1001

  20 diciembre 2016
  Buen hotel en general.

  Estupenda relación calidad precio, apenas a 10 minutos caminando del City Hall. Habitaciones limpias y espaciosas. Televisión de pantalla plana, secador, caja fuerte, WI-FI...., todo tal cómo se indica en su web. Ubicado en Botanic Avenue, en la que la oferta de restaurantes y pubs es bastante amplia. Cuenta con una estación de tren (Botanic train station) apenas a 20 metros, la cual puede ser muy útil a la hora de visitar el museo Titanic. El único pero es la calidad del sueño dado que hay una especie de disco bastante grande justo al lado. Destacar la amabilidad y atención del personal del hotel, nos ayudaron en todo momento al mismo tiempo que custodiaron nuestras maletas hasta la hora de ir al aeropuerto.

  

• Elisabeth G

  02 junio 2017
  Buena relación calidad- precio

  Habitaciones amplias y limpias. La suite una pasada. Lo peor es que no tiene ascensor . Lo mejor el desayuno (sin lugar a dudas) puedes elegir entre un menú con distintos platos. Buen ambiente, el servicio inmejorable, el personal del restaurante muy simpáticos ( como casi todos los irlandeses)

  

• diegov7419

  09 julio 2018
  Buenisimo

  Excelente hotel. Nos asignaron la Collins Suite. Muy limpio, cama gigante y comida. Suite amplia y baño también. Conexión directa al bar y restaurant. Atención amable y rápida. Completamente recomendable. No queda en el centro, pero a menos de 10 min caminando.

  

• GerardoC272

  17 julio 2018
  Habitación increíble.

  El hotel se encuentra a 10 cuadras del centro en el barrio de la Universidad con muchos locales para comer y/o tomar algo. El personal muy amable. La habitación era sensacional, enorme, decorada como en un palacio y el baño también es grande. La único malo por decir es que en la habitación la conexión de WIFI era lenta pero al salir de la misma, volaba. Recomiendo el hotel y volvería sin pensarlo.

  

• Uola_caracola

  20 abril 2019
  Enooorme

  La habitación era enorme, con una decoración muy rococó, enmoquetada (como todas en esas zonas) con una gran cama, cómoda y un baño inmenso (aunque la ducha era algo difícil de usar y el agua salía hirviendo). Tenías un hervidor de agua con café, té, agua y unas galletitas para tomar. El personal muy amable y atento. Justo en frente hay varios bares y restaurantes y un cajero automático justo en la esquina (el cual necesitarás si no llevas libras para pagar en el restaurante de en frente que es genial en relación calidad-precio pero no aceptan tarjeta jeje