Un destino que invita a sentir, saborear y descubrir paisajes y tradiciones nuevas, eso y mucho más es Portugal. Sea el tipo de viajero que seas, el país te ofrece un plan adaptado a ti: rutas naturales tanto en mar como en la montaña, visitas culturales que muestran su rico legado histórico, experiencias espirituales que te harán reconectar contigo mismo o saborear productos de Km 0. Continúa leyendo para descubrir los cuatro puntos de vista desde los que puedes disfrutar de este maravilloso destino turístico. Si eres un viajero activo, te encantará recorrer su entorno natural y visitar sus piscinas naturales, además de vivir la apretada agenda de la icónica isla de Madeira durante todo el año. Si buscas experimentar un Portugal más introspectivo y espiritual, existen rutas que te harán descubrir la herencia religiosa del país y su amplio patrimonio arquitectónico. No lo dudes más, ¡Portugal te espera!
El cielo nocturno repleto de estrellas y constelaciones de Portugal es uno de sus mayores reclamos turísticos. De hecho, el país alberga diversos observatorios -declarados Destinos Turísticos Starlight por la Fundación Starlight- que permiten disfrutar de estos cielos libres de contaminación lumínica.
Dark Sky® Aldeias do Xisto, Dark Sky® Alqueva y Dark Sky® Vale do Tua son algunos de ellos. El primero, ubicado en la zona central del país, es el segundo destino Starlight certificado de Portugal y agrupa un total de 27 aldeas protegidas por sierras que actúan como barrera natural frente a la iluminación artificial excesiva. Sus cielos limpios son ideales para la observación astronómica, ¡no te los pierdas!
Por su parte, Dark Sky® Alqueva, en el Alentejo, es una gran reserva internacional que abarca casi 10.000 km² y rodea el lago Alqueva. Aquí podrás disfrutar de constelaciones como la Osa Mayor, Casiopea o la Vía Láctea, entre otras, con una claridad espectacular, ¿te animas? En la pequeña aldea de Cumeada dispones de telescopios de última generación y visitas guiadas que te permitirán conocer todos los detalles del cielo nocturno.
El Dark Sky® Vale do Tua no se queda atrás, de hecho, fue la primera zona protegida de Portugal que recibió el sello Starlight. Además de atraer a los amantes de la astronomía, también es el lugar perfecto para observar la fauna local debido a su ubicación en pleno Parque Natural.
Para completar la experiencia, el Museo del Vidrio de Marinha Grande es otra visita obligada de las que “brillan”. Se encuentra en un palacio neoclásico del siglo XVIII que exhibe una gran colección de vidrieras, cristales antiguos y piezas decorativas desde el siglo XVII al XX. Asimismo, es posible observar los talleres originales de la Real Fábrica de Cristal, ¡una verdadera experiencia inmersiva!
La pequeña isla de Madeira es uno de los destinos portugueses más populares gracias a su amplia oferta de actividades y su buen clima, lo que le permite ser visitada en cualquier época del año. Desde actividades en plena naturaleza hasta eventos culturales y una gastronomía que deleita todo tipo de paladares, Madeira tiene algo preparado para ti.
Las competiciones deportivas de alto nivel son sus eventos más destacados, atrayendo a atletas y visitantes de todas las partes del mundo. Algunos de estos eventos son la TransMadeira, una carrera de trail que recorre los paisajes más impresionantes de la isla a lo largo de 100 kilómetros; el Trail do Porto Moniz, otra carrera muy popular que atraviesa zonas volcánicas y costeras; ADN Race, una competición muy completa que combina diferentes modalidades deportivas.
Más allá del deporte, la agenda de ocio de Madeira sorprende a todo aquel que la visita. Es de obligada mención el famoso Festival de las Flores del Funchal, una fiesta que tiene lugar durante el mes de mayo y que transforma las calles con alfombras de flores, coloridos desfiles, música y espectáculos de pirotecnia, creando un ambiente festivo que atrae a miles de espectadores.
Los amantes de la naturaleza también están en el lugar correcto, ya que Madeira alberga algunas de las piscinas naturales más atractivas del Atlántico. Las de Porto Moniz, de origen volcánico, cuentan con todo tipo de instalaciones modernas que permiten pasar un día en familia con todo tipo de servicios disponibles. Por su parte, en Poças das Lesmas, en Seixal, es posible disfrutar de aguas turquesas en un entorno volcánico digno de admirar. Asimismo, las piscinas del “Acuario de Madeira” sorprenden por la transparencia de sus aguas y el entorno natural que las rodea. ¡No te las pierdas!
No te puedes ir de Madeira sin hacer una pausa para degustar su deliciosa gastronomía. Algunos de los platos típicos esenciales son la brocheta de carne con maíz frito, las lapas a la plancha, todo tipo de mariscos aderezados con ajo y limón o las frutas exóticas como la chirimoya y el maracuyá. Además, no dudes en complementar tu comida con el tradicional vino local y una “Poncha” de aperitivo.
Los devotos pueden encontrar en Portugal un lugar donde vivir experiencias espirituales únicas, destacando dos emblemáticas rutas de peregrinación: los Caminos de Santiago y los Caminos de Fátima. Desde la Edad Media, los Caminos de Santiago han marcado la identidad de muchos pueblos portugueses cuyas iglesias, conventos, hospitales y albergues acogen y asisten a los peregrinos que atraviesan el país de norte a sur con destino a Santiago de Compostela. Este recorrido es una excelente oportunidad para admirar la rica herencia cultural y arquitectónica de la zona reflejada en capillas, esculturas, pinturas e incluso fiestas tradicionales.
Por su parte, la tradición de los Caminos de Fátima se remonta a 1917 tras las apariciones de la Virgen en el pequeño pueblo de Fátima, en el corazón de Portugal. Las rutas conducen al Santuario de Fátima, uno de los principales centros de culto mariano del mundo, y a pesar de tener este destino común, son muy diversas: Camino del Tajo, Ruta Carmelita, Camino del Nord, Camino de Nazaré, Camino del Medio Tajo, Camino de Candeeiros y Camino del Centenario.
La diversidad geográfica, cultural e histórica de Portugal ha dado lugar a una gastronomía muy variada, influenciada principalmente por los productos marítimos. Su cercanía al océano Atlántico marca esta identidad culinaria, con pescados y mariscos como protagonistas indiscutibles del recetario portugués. El bacalao o bacalhau y sus mil y una formas de cocinarlo es todo un emblema del país, destacando recetas clásicas como el bacalao à Brás.
No obstante, Portugal no solo vive del mar. Existen productos cárnicos de calidad como la ternera, el cerdo o el cabrito con Denominación de Origen Protegida (DOP) que tienen un lugar importante en la culinaria del país, destacando recetas como el cocido a la portuguesa.
El vino portugués es otro emblema nacional. Algunos tintos como los del Douro y el Alentejo, además del tradicional vino de Oporto, cautivan todo tipo de paladares y son todo un must para degustar. ¡No dudes en realizar una cata y visitar los asombrosos campos de viñedos!
Para finalizar, no te puedes ir de Portugal sin probar la deliciosa repostería conventual. El dulce más popular es el pastel de nata, perfecto para tomar como postre o acompañar una taza de café. ¡Delicioso!