Marruecos y las rutas de las Kasbahs

Las kasbahs o alcazabas son típicas del Norte de África. Se trata de construcciones fortificadas de carácter urbano que se utilizaban como residencia del gobernador de una determinada región, al mismo tiempo que servían como defensa del emplazamiento donde se ubicaban. Así, en su interior habitualmente se encontraba un pequeño barrio militar.

También existen ejemplos de este tipo de construcciones en España, entre las que destaca la Alcazaba de Málaga, aunque existen otras en Almería, Granada y Mérida, por ejemplo.

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Ouarzazate, cuyo nombre en árabe significa “sin ruido”, es parada obligatoria en el camino que separa Marrakech del desierto del Sahara y, por lo tanto, de la Ruta de las Kasbahs.

Es conocida como la “Hollywood de África”, ya que en ella se han grabado películas tan importantes como  “Lawrence de Arabia” (1962), “Jesús de Nazareth” (1977), “La joya del Nilo” (1985), “La Momia” (1999) o “Gladiator” (2000), entre otras.

De hecho, en esta región encontramos varios estudios de cine, incluyendo uno de los más grandes del mundo, los Atlas Studios. Una visita a sus instalaciones proporciona un paseo por la Historia del Cine, ya que en ellas se han rodado títulos tan conocidos como “La Guerra de las Galaxias” (1977), “La última tentación de Cristo” (1988) o la mítica “Los Diez Mandamientos” (1956). También recientemente ha servido de escenario para algunos capítulos de la serie “Juego de Tronos”.

Puedes llegar a esta ciudad en una excursión organizada desde Marrakech, aunque hay quien prefiere alquilar un taxi durante todo un día. La forma más económica, no obstante, es llegar en autobús.

En Ouarzazate se encuentra una de las kasbahs más importantes y mejor conservadas de Marruecos, la Kasbah Taourit. Declarada “Patrimonio de la Humanidad” por la UNESCO, sirvió como escenario para alguna secuencia de la película “Gladiator”, y en 2007 se abrió en su interior un Museo del Cine.

Esta kasbah fue residencia de uno de los gobernadores más poderosos de la región, y está considerada como una de las más hermosas de Marruecos. Está compuesta por una superposición de muros y torres almenadas, destacando los huecos geométricos de la fachada. El grosor de sus muros, de un tamaño impresionante, servía de protección frente al calor diurno y el frío de la noche.

Su interior estaba decorado con maderas talladas y policromías, y sus habitaciones se comunican por pasillos laberínticos. La habitación principal de los aposentos del Gobernador cuenta con relatos del Corán, y una de las estancias más bonitas es la de la “esposa favorita”, que cuenta con un balcón sobre el patio.

En la zona interior de la fortaleza, conocida como Ksar de Tourirt, se encuentran distintas casas de adobe decoradas con motivos tanto del Islam como del Judaísmo. La entrada es gratuita, pero para visitar el interior del palacio se debe comprar una entrada.

Ksar de Ait Ben Hadu, ciudad fortificada, también declarada “Patrimonio de la Humanidad” por la UNESCO en 1987, se encuentra a unos 190 kilómetros de Marrakech y a 30 kilómetros de Ouarzazate. Emerge como un oasis en medio del Valle del Río Ounila.

Se cree que fue construida en el siglo XI, aunque en sus orígenes fue un asentamiento bereber, quienes acostumbraban a construir campamentos fortificados cerca de cauces y tierras para el cultivo. Su posición estratégica en la ruta que unía la antigua Sudán con las ciudades imperiales de Marrakech pronto le confirió gran relevancia y afluencia de viajeros, lo que hoy en día se traduce en un gran número de riads y hoteles que dan cobijo a sus numerosos visitantes.

Los riads son pequeños hoteles de unas 5 o 6 habitaciones, frecuentemente regentados por el dueño del establecimiento, que en los últimos años se han puesto muy de moda entre los turistas internacionales, lo que ha incrementado su número por toda la geografía marroquí.

En este ksar también se rodaron escenas de películas como “El cielo protector” (1990), “Alejandro Magno” (2004) o “Babel” (2006), además de algunas ya mencionadas con anterioridad.

El Valle de Dades va desde Quarzazate hasta el este de Tinghir, una zona que eligieron los bereberes para defenderse de los invasores, y debe su nombre al río que lo atraviesa, el río Dades.

Este valle es para el visitante un auténtico descubrimiento, ya que cuenta con zonas de nieve por un lado y zona de semidesierto por otra, y que frecuentemente se visita en rutas organizadas de 4×4.

Aquí se encuentra la ciudad de Nkob, donde encontramos hasta 52 kasbahs y un gran palmeral. Y en la ciudad de Tinerhir se puede disfrutar de las Gargantas de Todra que, con un salto de unos 300 metros de altura, son un auténtico espectáculo.

Este valle es famoso también por sus rosas, que cuenta con un baile típico – el Ahawash, con el que se celebraba el fin de la recolección, pero que hoy en día se baila en bodas y todo tipo de eventos – y un festival. Éste se celebra en mayo, coincidiendo con la recogida de la variedad conocida como “Rosa de Damasco” en él se exponen todo tipo de productos elaborados con esta flor y las calles se cubren con una lluvia de pétalos. Es famosa también el “agua de rosas” de esta zona, que cuenta con certificación BIO.

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¿Has realizado la Ruta de las kasbahs? ¿Cuál es tu kasbah favorita? Esperamos tu opinión: