Setúbal

El encanto de Setúbal reside en sus orígenes, siempre fue una pequeña aldea de pescadores y, hoy en día, es considerado el cuarto puerto más activo de Portugal.

Precisamente su historia es la que dibuja el camino de sus calles y de sus zonas más impresionantes. El casco antiguo está abrigado por dos murallas –una medieval y otra perteneciente al siglo XVI–, es peatonal y muy característico, las calles se cruzan unas con otras contando diferentes historias y albergando la mayor parte de los monumentos más importantes de la ciudad, como el Aqueduto dos Arcos, el Castelo de São Filipe, las propias Murallas de Setúbal, la Casa das Quatro Cabeças o la Estátua de Bocage, el famoso poeta portugués.

En los barrios de Saboaria y Fontainhas se concentraba toda la actividad industrial, las fábricas de pescado que allí se erigieron  tienen reconocimiento por todo el país y de las más famosas, que también tiene acceso al público, es la Fábrica Romana de Salga, que vivió la época dorada de la ciudad cuando la sal llegó por primera vez a su puerto.

El otro gran atractivo turístico de Setúbal es el estuario del río Sado, lugar en el que está asentada la ciudad. Gracias a esta situación, Setúbal cuenta con increíbles playas y maravillosos recursos naturales, siendo el Parque Natural de Arrábida el más importante, considerado Sitio de Especial Interés para la Conservación de la Naturaleza, además, cuenta con una preciosa y tranquila playa llamada Portinho da Arrábida de aguas cristalinas perfecta para hacer deportes acuáticos, es un poco complicado acceder hasta ella si no se tiene coche por la estructura de las carreteras, pero es considerada una de las playas más bonitas de la costa portuguesa.

Entre las excursiones más recomendadas para hacer dentro de la ciudad destaca la visita a una colonia de delfines que vive en el propio río, aunque si se es lo suficientemente afortunado, quizás se puedan ver desde la Península de Troia, situada al lado de Setúbal. De hecho, gracias a su proximidad, Setúbal se ha visto beneficiada del turismo de sol y playa que viaja hasta Troia.

El pasado pesquero juega un papel muy importante en la gastronomía de la región, los tres platos estrella son platos marinos: las almejas aderezadas con ajo, cilantro y un toque de limón, la cataplana y el salmonete. De postre, lo más habitual es pedir las deliciosas tortas de azeitão.

Llegar hasta Setúbal desde Lisboa es fácil, además de que tan solo está situada 50 kilómetros al sur y cuenta con tren directo desde la capital que tarda menos de media hora, si no en coche sería la opción más rápida, una escapada perfecta de un día para tener una experiencia portuguesa completa.