Hotel Adlon Kempinski Berlin

Comentarios destacados

• Clauxxx

  17 noviembre 2019
  Histórico y hermoso

  Súper bien conservado parece nuevo pero los elevadores de manecilla te dicen q es imposible q sea nuevo el hotel tiene precios muy accesibles y esta de mucho lujo y comodidad. Está junto a la puerta de brandenburgo q es histórica y digna de fotografiar. A una cuadra está un búnker de Hitler donde se presume pasó sus últimas horas pero no se permite aún la entrada sin embargo en la ciudad hay otros bunkers q si puedes visitar. Aunque es un recorrido largo y un tanto pesado para los adultos para niños debe ser cansadísimo. No deja de ser interesante. Muchos restaurantes típicos en los alrededores

  

• Pablo A

  24 noviembre 2019
  muy buen hotel

  realmente el hotel para hospedarse si se viaja a Berlin. Mi estadía fue estupenda y la atención junto con la decoración y limpieza fueron los destacados. El desayuno es extraordinario ! Realmente lo recomiendo!

  

• cvaldelamart

  02 diciembre 2019
  Elegante

  Muy lindo hotel, elegante con un lobby clásico y un lobby bar espectacular con buen servicio, buena comida y bebidas, por las noches hay música en vivo. Las habitaciones son bellísimas, amplias con buena cama y almohadas, baño con ducha y Tina, grande, sus amenidades son Salvatore Ferragano. El desayuno tiene una amplia variedad de productos. Cerca de la puerta de Brandenburg y de muchas atracciones culturales. Es un hotel elegante con una excelente ubicación y súper recomendado.

  

• letigyerro

  10 diciembre 2019
  Uno de los mejores hoteles de Berlin

  Hotel elegante, clásico, grande y conservador. Servicio impecable, ubicación estupenda, cerca de todo y un menú fantástico de desayuno. No sabría destacar una sola cosa de este hotel, ya que todo me fascinó, limpieza del hotel impecable. Habitaciones grandes y espaciosas, con un estilo clásico, el personal impecable. Si volviese a Berlin, sin duda sería mi primera opción para alojarme.

  

• Josn72

  04 enero 2020
  Me lo esperaba mejor

  En mi opinión el hotel vive de su historía y hoy por hoy no es ni de lejos lo que fue. Las habitaciones son amplias y cómodas. Pero necesitan una reforma urgente. Algunas partes como los interiores de armario están decadentes y aunque limpios. Parecen sucios. En cuanto a servicio se recepción y conserjería...bastante mejorable. Nadie nos acompañó a la habitación ni nos explicó nada del hotel...una sola reserva que le pedimos al altivo y antipático conserje, la hizo mal...suerte que al ser dentro del hotel no hubo problema en soluciónalo con el restaurante directamente... El paquete de fin de año, carísimo para lo que es... muy decepcionante. En fin, visto! Pero no volveremos. La localización al lado de la puerta de Brandenburgo y del Parlamento es muy conveniente. Pero queda algo alejado del centro... la relación calidad precio al menos para fin de año...en mi opinión no es buena.