Hotel Viñas de Lárrede

Comentarios destacados

• juanaQ1408LJ

  03 octubre 2020
  De 6 estrellas

  El cielo en la tierra, atención exquisita, amabilisimos, el señor de recepción nos guió en todo maravillosamente, la directora del hotel no puede ser más simpática, te preguntaban, se preocupaban.Desayuno delicioso,productos de calidad, buenísimo todo. La decoración, las vistas, un lujo.La localización es magnífica para visitar la zona o bien para quedarte en el hotel y lo salir Repetiremos.

  

• RUBEN11052014

  07 octubre 2020
  Excelente

  Hemos pasado unos días con nuestra hija, y la verdad que una maravilla, el hotel precioso y muy buena ubicación, todo el personal super amables, en todo momento pendientes de todo, muy muy agusto, repetiremos seguro en pareja ya que el lugar es idílico e invita al romanticismo

  

• GERARDO G

  11 octubre 2020
  Esperaba mucho más

  El día de llegada se me cobran por error casi 500 euros correspondientes a otro cliente. Se me abona tal cantidad, la cual sigue bloqueada. Un hotel de tal categoría no tiene que tener tales errores. Deficiente o nulo wifi, aspectos del hotel que no corresponden con tal categoría, como el papel de wc, pésimo, más delgado imposible, toallas de ducha pequeñas, inadmisibles con la categoría del hotel. La cena FABULOSA Y FANTASTICA, así como el trato de la camarera de ese día por la noche, el día miércoles 7 de Octubre, muy amable. Con respecto al resto esperaba mucho más. Y luego incomprensible la no admisión de perros, cuando el posabasos decía en inglés "tú debes amar a los perros". No creo que vuelva porque un establecimiento de esta categoría tiene deficiencia de servicios y no se puede cobrar servicios de 4 ó 5 estrellas cuando se carece de ello y más tras venir del día anterior del HOTEL MONASTERIO DE BOLTAÑA, donde cobran atendiendo a la categoría de 5 estrellas que es.

  

• Safaba2015

  01 noviembre 2020
  Cálido y bueno.

  Totalmente aislado, pero cercano al resto del mundo, estructuras cálidas de madera, pequeño y acogedor, excelente atención del personal, una cocina rayando en la perfección, y unas vistas sobre todo al valle, que en otoño le dejan a uno con la boca abierta. A mí que se me gana principalmente por el estomago, ya desde la degustación del primer plato, el hotel tenía asegurado que volveremos. Una carta pequeña, pero que cubre todos los "palos". que decir del carpaccio de potro prirenáico con virutas de parmesano, o del tartar de trucha del Cinca, con manzana en texturas y cuajada de oveja,sin desmerecer al Magret de pato glaseado con chutney de mango y ensalada, un genial gazpacho de sandía como aperitivo del chef, el foi mid cuid de pato con higos confitados, etc, sin olvidar al resto de platos y postres riquisimos, como el hojaldre de fruta de temporada aromatizada con espuma de yogourt ó la torrija caramelizada con crema pastelera y fruta de la pasion. En fin, que he puesto énfasis en la cocina, orque soy un gourmet siempre que puedo, e imaginaba que en Viñas de Lárrede podría disfrutar de mi gula. El desayuno, novedoso, pudiendo pedir después del standard, lo que te apetezca. El otro punto, el personal de servicio. Amables y serviciales hasta limites muy altos. La delicadeza de la Directora, que lo mismo sale a acarrear maletas, que sirve platos en el comedor. Como ya se ha escrito todo lo escribible sobre éste paraiso del silencio y su halo romántico, no me estiendo más. Que se acabe la pandemia, que puedan volver a abrir y prometo volver a Viñas de Lárrede. Muchas gracias por la estancia !!!!

  

• roc_om170

  20 diciembre 2020
  EXTRAORDINARIO

  Desde que llegas a hotel te sientes mimado y cuidado,habitación confortable,grande,limpia con terraza,vistas únicas,la cama tan cómoda que te atrapa,difícil despertarse pronto El desayuno inmejorable cada persona que te atiende te da un trato único,la verdad es que en esta era que nos toca vivir se agradece que te cuiden,te sonrían y te aconsejen de rutas que hacer. Todas las medidas de seguridad posibles. La cena fue una delicia,cada plato estaba mejor que el anterior,por no hablar de los postres que eran un vicio. El entorno único,la decoración acogedora y además música elegida con mimo en desayunos,comidas,cenas y en la estancia en la sala de estar con su chimenea. Salimos a tomar una copa a la terraza y nos encendieron también las estufas de leña. La verdad que todo un lujo haber disfrutado de un fin de semana de ensueño. Por decir una crítica constructiva sin importancia,el café del desayuno con espuma en la leche hubiese sido ya el top 10. Mil gracias.