Country Hotel Takayama

Comentarios destacados

• polalluecreus

  27 agosto 2019
  Al lado de la estación pero camas incómodas

  El hotel está justo delante de la estación del pueblo, tanto de trenes como de buses, lo que lo hace muy práctico para las excursiones a los pueblos cercanos que hay que ver. Tiene un super debajo, que es muy práctico para el desayuno (ya que en el hotel es muy caro). Los colchones son muy duros, como piedras, realmente incómodos. Habitaciones muy pequeñas, con la cama accesible solo desde un lado. El baño es prefabricado todo de plástico, parece como de barco. El aire acondicionado al mínimo es demasiado fuerte y si lo quitas hace calor. Es muy cutre en general. No tiene cortinas. El personal no habla inglés prácticamente.

  

• BerliR6

  18 septiembre 2019
  Básico

  Hotel sencillo, austero y un poco anticuado. Habitaciones justas y con olor a tabaco. Las camas son increíblemente duras, parece que duermes encima de una tabla, así que si no estás acostumbrado a dormir tan duro, no descansarás lo suficiente. Lo mejor del hotel sin duda la ubicación en frente de la estación de tren y de autobuses y el precio. Seguramente no repetiría si volviera a Takayama.

  

• Palomitasales

  29 septiembre 2019
  Decepción total

  Situado cerca de la estación de tren y de la zona central. Pedimos una habitación especial por nuestra luna de miel y nos dieron una habitación de fumadores. El olor es fuerte y no te llegas a acostumbrar. La cama es muy pequeña y está contra la pared, muy incómoda para dormir. La almuada es de semillas y solo hay una por persona. La decoración es muy antigua, de peli de los 60. El baño es todo de plástico, parece que sea el de un barco, en muy pequeño. A penas hay espacio para abrir las maletas. El desayuno no está mal, hay comida japonesa pero también puedes comer tostadas y tortilla. No repetiría y me quedaría en alguno de los Ryokan del pueblo.

  

• Esydk

  02 octubre 2019
  Ubicación excelente, servicio normal y limpieza mala

  Lo mejor del hotel es la ubicación, frente a las estaciones de autobuses y tren JR. El problema viene cuando descubres que en recepción no hablan inglés (aunque admito que lo intentan) y hacer un check in termina siendo una comedia de los hermanos Marx. Lo malo viene en la habitación, nosotros teníamos una habitación de fumadores, y el hecho de que sea de fumadores no quiere decir que haya que descuidar la limpieza, en Tokio también tuvimos habitación de fumadores y no olía mal ni estaba sucia, de hecho la limpieza era excelente. Para pasar una noche puede valer, pero yo no volveré, mejor valorar otras opciones.

  

• xabi c

  04 octubre 2019
  Decoracion pre-tiempos de Edo

  La ubicación es perfecta, tanto si llegas a Takayama en tren o bus, el hotel se encuentra a un minuto a pie. Llegamos a recepción y nos atendió una amable recepcionista que tras darnos las llaves de la habitación nos informó de que en caso de perder las llaves o romper el secador de pelos tendríamos que abonar 30000 y 3000 yenes respectivamente. Le faltó indicarnos qué nos pasaría en caso de arrojar el pequeño frigorífico por la ventana o si rompíamos la puerta con un hacha. Estuve a punto de preguntarle si nos harían un descuento en caso de hacer un combo y perder la llave y romper el secador. Ante estos avisos uno espera que el hotel sea exquisito en lo que son sus deberes y con esa idea nos dirigimos a nuestra habitación. No sé si debido a la cercanía de la celebración de Halloween, nos sorprendieron las telarañas que había en la habitación. Mi mujer y yo tuvimos una breve discusión acerca de si las arañas que había en dos esquinas del techo eran de verdad o simplemente eran atrezzo. Finalmente, mi mujer que es más valiente que yo tuvo que matarlas. Estuvo guay, una experiencia más. Por otro lado, las paredes de la habitación tenían manchas y rallas. Me faltó preguntar después en recepción cuánto les habían cobrado a los huéspedes anteriores por dejar la habitación más marcada que las paredes de una guardería. Por lo demás, los pasillos del hotel me recordaban a las visitas que le hacía a mi abuela en su residencia de ancianos: Pasillos anchos y fríos, con baldosas tanto en el suelo como en las paredes. Ojalá el techo de la habitación también hubiese estado embaldosado, hubiese sido más fácil limpiar los restos de araña. Por lo demás, el desayuno dejaba bastante que desear. Aunque anuncian desayuno japonés y occidental, lo más occidental del hotel es el Atrezzo Halloween antes comentado. En resumen, antes de avisar/amenazar con multas a los clientes al hacer el check-in, creo que estaría bien que se aseguraran de que ellos cumplen con lo suyo y tienen las habitaciones limpias. P.D. Las camas son mas duras que las katanas de Hatori Hanso