Auberge du Carre St Louis

Comentarios destacados

• Paloma_T

  27 septiembre 2017
  cómodo y bien situado

  El personal es muy amable, hay un par de latinos, con lo cual el español no es problema. pero en general, todos son muy amables e informativos, uno de ellos incluso nos dibujó un plano de cómo llegar al centro!! Nosotros cogimos una habitación tipo loft, que tiene cocina completa. La cama es cómoda pero no demasiado grande, la típica Queen size. Pero hay habitaciones de varios tipos. Creo que hay habitaciones con terraza, pero la nuestra daba a la calle principal, que, entre el tráfico y las obras, es muy ruidosa. Por otro lado, el baño está muy limpio y con todo lo necesario, pero es demasiado pequeño para un loft, prefiero algo menos de espacio donde el sofá, pero más en el baño, que necesitas comodidad. Un detalle es que arreglan las habitaciones muy tarde, o quizás tuvimos mala suerte, pero siempre las hacían sobre las 5 de la tarde, con lo cual uno de los días, ya ni la hicieron. En cuanto al parking, tiene unas cuatro plazas detrás, en un callejón y aunque lo habíamos reservado, no había espacio. El recepcionista nos acompañó y lo dejamos como pudimos encerrando a los demás, así que el sistema es dejar allí las llaves del coche, por si tienen que moverlo Las habitaciones tienen su propia entrada privada por un portal pero no hay ascensor y las escaleras son largas y bastante empinadas, así que no es muy recomendable para subir muchas maletas o carros de bebé y totalmente inviable para sillas de ruedas Se puede llegar fácilmente a las calles más céntricas, a unos 15 minutos a pie, y el puerto está al final de la misma calle del hotel, a unos 25 minutos a pie. De todas formas la parada de metro de Sherbrooke está justo en la acera de enfrente

  

• Jonny M

  11 febrero 2018
  Cómodo y céntrico sin embargo con mal sabor de boca

  El hotel es cómodo y céntrico sin embargo me dejó mal sabor de boca primero por que en los 9 días que estuve solo en 2 ocasiones limpiaron la habitación y el echo de comunicarse a la recepción era imposible ya que nunca estaban por una remodelación y otra cosa fue que mi plan de viaje incluía desayuno tipo continental el cual jamás se me otorgó cuando en el paquete venía estipulado que lo incluía y la gente del hotel solo se reservó el derecho a decirme que este no lo incluía por la remodelación de su recepción y restaurante cuando en los documentos de mi reserva venía claramente incluido. El hotel está bien para estar uno o 2 días yo les recomiendo ver otras opciones de hoteles en la zona.

  

• dalogo

  06 agosto 2018
  Repetiría

  La habitación doble estaba bien de tamaño. Tenía una minicocina con placa de inducción de un fuego, cafetera y microondas. El menaje era un poco justo. Solo 2 de cada (2 vasos, 2 tazas, 2 tenedores...etc) Para cocinar, una sartén y un cazo. El cazo no funcionaba con la inducción. Nuestra habitación estaba en la segunda planta. Había ascensor pero solo funcionaba hasta las once de la noche. Todo estaba bastante limpio. El baño era grande y moderno. El desayuno era tipo buffet, con café, té, zumos, bollos, croisants, tostadas, cereales, frutas y algo de salado (tortilla de queso y salchichas los 2 días que estuvimos). El personal fue atento y algunos hablaban español. La situación es buena, en 15 minutos estás en la zona del viejo puerto

  

• Belén E

  19 octubre 2019
  Un desastre

  Las fotos no se corresponden con la realidad. El hotel está muy descuidado tanto en limpieza como mantenimiento. Avisamos en recepción de que la cisterna se atascaba, algunas luces no funcionaban y el aire acondicionado no se podía apagar y salía frío. Nos dijeron que no estaba el jefe y no podían hacer nada hasta el día siguiente, pero tampoco hicieron nada.

  

• Esalva

  18 octubre 2019
  No recomiendo

  Hotel muy cutre, nada funciona, es muy sucio, tiene unos pasillos intrincados y el desayuno muy mal presentado. Mis amigos tuvieron de subir a la 4a planta, luego pasar por un pasillo exterior y bajar otra escalera para llegar a su habitación; la misma escalera al bajar daba directamente a la calle. En la mia, la bañera estaba llena de pelos; les pedí que la limpiaran, pero los pelos seguieron ahí. Las sábanas parecieron ya usadas, estaban arrugadas y manchadas.