Lindbergh

Comentarios destacados

• montanes68

  22 julio 2018
  Habitacion bien, todo lo demas mal...

  Nos alojamos 3 noches, habitacion bien, el hotel esta muy lejos del centro, debes coger autobus 800 u 801 que en 25´ y por 3,5$ te deja en el centro, el desayuno muy muy pobre, sin fiambre ni bolleria, todos los cubiertos, platos y vasos de plastico, parking gratuito, recepcionistas bordes y estresados...

  

• aenriquedp

  05 agosto 2018
  HOTEL DE PASO

  Aunque hay autobuses de línea muy cerca, se encuentra a 8 kilómetros del centro de Quebec. La habitación no está mal y el cuarto de baño es amplio con buena ducha. El desayuno es bastante limitado. El trato del personal fue correcto y amable. Tiene un cajero dentro del propio hotel, lo cual es útil si quieres sacar dinero. No destaco nada más y lo recomendaría como hotel de paso si te quedas una noche y no encuentras más cerca del centro de Quebec. Enjoy!

  

• Elena H

  17 agosto 2018
  Pésima localización, aunque habitaciones buenas

  Cuando yo voy de vacaciones para ver las ciudades quiero hoteles céntricos. Este hotel es un hotel pequeño, a las afueras de Québec, a 5 minutos andando del Centro Comercial Laurier. Tiene 2 plantas, desayuno continental con poca variedad y las habitaciones de la planta baja salen directamente a la zona del desayuno. Los cubiertos, vasos y platos son de usar y tirar. Las habitaciones son amplias, modernas y limpias y en el baño hay gel, champú, secador y espejo. Hay nevera y caja fuerte. La pega es que está muy lejos del viejo Québec que es la zona turística, antigua y con tanto encanto. Andando se tarda más de 1 hora en llegar al famoso hotel Château Frontenac, en lo alto del centro de Québec.

  

• abuelocharly

  08 octubre 2018
  HOTEL MUY COMODO

  Partamos de la premisa q es fundamental saber donde te vas a alojar (zona) para despues hacer un comentario imparcial. Este hotel está un poco alejado del centro viejo de Quebec, pero hay un bus express frente al hotel q te lleva en unos 20 minutos ( hay que analizar aqui si conviene pagar más por menos comodidad ó alojarse muy comodamente y "perder" 20 minutos en viaje. Tambien saber q hay unas tarjetas para viajar que te reducen mucho el precio del viaje. Yendo al hotel en sí, desde afuera no es destacable, pero dentro es otra cosa. Las habitaciones son bastantes amplias, con muy buenas instalaciones y todo funcionando perfectamente.La limpieza es muy buena. El nivel de ruidos dentro del hotel es muy bajo, con la salvedad de lo comentado mas abajo sobre los buses de turismo que paran en el hotel. El desayuno es normal, bien servido y no hay demoras para utilizar el salón. A pocos metros hay un centro comercial muy grande con todo tipo de tiendas y un patio de comidas con diversidad de ofertas gastronomicas. El entorno del hotel es de edificios muy suntuosos de oficinas y hoteles de diversa categoria. El barrio en las calles transversales es de viviendas muy modernas y cuidadas. La seguridad, como en todo Canada, es optima. Solo voy a criticar que, como me ha pasado en otros lugares, y sin saberlo por que el hotel no lo informa, hay llegada de grupos a la tarde y salida a la mañana siguiente lo que complica un tanto el descanso si la habitacion esta al frente ya que a los buses los ponen en funcionamiento muy temprano y el ruido de los motores diesel y la polución que generan no es nada agradable. Todo se solucionaría si estacionan los buses en la Avenida que está a unos 50 metros de la entrada del hotel ( este comentario se lo hice en forma personal al conserje). Pese a ello entiendo que una estadia en este hotel será una experiencia agradable y a un precio muy razonable en una ciudad cuyos costos de alojamiento y comida son altos.

  

• XB_Barcelona

  05 septiembre 2019
  Alejado del centro, desayuno para olvidar

  El hotel se encuentra muy alejado del centro, entre 20-30 minutos en autobús. Las habitaciones son correctas en tamaño y estado, pero te puede tocar enfrente del espacio de desayuno con el consecuente ruido de buena mañana. El espacio de desayuno es pequeño, realmente es un pasillo entre habitaciones, con lo que a veces es complicado encontrar mesa donde sentarse, además el espacio donde está situada la comida también lo es y facilita la realización de grandes colas para acceder a la escasa y poco variada comida que hay, en conjunto, un desastre de desayuno.